Lascaux II

Situada en Montignac-Lascaux, en el Périgord Noir, la cueva de Lascaux es una obra maestra del arte prehistórico. Sus frescos representan alrededor de 600 animales: caballos, toros, ciervos, cabras montesas, felinos, un oso, un rinoceronte e incluso una figura fantástica comúnmente llamada "el Unicornio". Los acompañan signos enigmáticos que despiertan la curiosidad de todos.
Conservada durante más de 50 años, la cueva de Lacaux se puede descubrir en una copia situada en la misma colina que la cueva original y enterrada en el suelo. Una proeza tecnológica de gran rigor científico y artístico permitió recrear la atmósfera del lugar y el 90% de sus pinturas policromadas (Sala de los Toros y Divertículo Axial), realizadas tal como eran hace 17 años con tintes naturales. Dos “esclusas museográficas” rememoran su historia y explican las técnicas de los artistas.